"El cadáver de la novia" por Mariana García Martín Irigoyen
La sociedad de los vivos parece más muerta que la de los mismos muertos. El mundo de los muertos, donde Víctor se siente más cómodo, es colorido y lleno de alegría. Los muertos se liberan de las restricciones, preocupaciones, dolores, entre otras cosas, que tenían cuando estaban vivos. El mundo de los vivos es un mundo lleno de represiones, gente amargada, preocupada por sí misma (egoísta), mucho más triste, oscuro, dolor, histeria, etc. En esa sociedad Víctor es incapaz de comunicarse, comienza a tartamudear cada vez que intenta decir algo y se pone nervioso todo el tiempo.
Cuando Victoria, la prometida de Víctor, estaba en su habitación preocupada por no poder saber dónde estaba su prometido, recibe una visita inesperada de él. Pero la visita es interrumpida por Emily, la nueva mujer de Víctor, que tenía un aspecto bastante particular, ya que al estar muerta su color de piel es de color fantasmal, una muy blanca y estaba vestida de novia. Emily se lo vuelve a llevar con ella al mundo de los muertos a su marido Víctor. Mientras ocurren estos hechos, Victoria desesperada al ver que un cadáver se llevo a su prometido, corre a buscar a sus padres para contarles lo sucedido. Sus padres cuando Victoria termina con su historia, se alteran y se enojan muchísimo, y comienzan a retarla, ya que lo único a lo que le prestaron atención en la historia fue que su hija había estado con su prometido en una misma habitación sin antes haber contraído matrimonio, y esto implicaba en el caso de que se enteraran las personas del pueblo una exclusión social sumado a una deshonra para la familia. En esta parte de la historia es en donde podemos encontrar claramente una de las tantas hipótesis de Freud, ya que el vivió a finales del siglo XIX, en una época en la que hablar sobre sexualidad era un tema intocable, no solo que estaba mal visto hablar sobre ello, sino que eran una locura las medidas que se tomaban, cuando se hablaba de placer como un sinónimo de sexualidad. El único fin que se le encontraba a la sexualidad era de reproducción.